Nonogasta sigue contaminada
La noticia de que una vez más la curtiembre reabrirá sus puertas como tal, no es una buena noticia. La historia se repite, con distintos actores, pero con los mismos métodos. Sus dueños se fueron una vez más dejando un pasivo ambiental , social y económico, con los trabajadores en el medio, y el gobierno sale en la defensa supuesta de la fuente de trabajo; pero esta vez con la mitad del personal que trabajaba anteriormente, dejando la curtiembre en manos de otros dueños por unos pocos años de comodato, “para ver como anda”, y en el medio, una clausura judicial por la terrible contaminación que provocó en el periodo de más de treinta y cinco años en que se elaboraron los cueros, a costa de la vida del pueblo, y de la salud de la tierra, el agua y el aire de nuestra región. La Asamblea El Retamo, había presentado un proyecto en la Banca del Ciudadano de Chilecito, para que esas familias tuvieran contención a través de la producción y puesta en valor agregado del cáñamo, una planta que no necesita tanta agua como el procesamiento del cuero, y al contrario de contaminar, descontamina los suelos contaminados con sopa química y metales pesados, se puede cosechar más de una vez al año, permite obtener valor agregado a través de los diversos productos que se pueden obtener del mismo, desde productos medicinales, hasta cueros, pasando por la construcción, productos alimenticios como el aceite, hasta de autopartes como el chasis, y hasta biocombustible para los vehículos. Una vez más, a pesar de las reuniones que se hicieron con funcionarios, el ofrecimiento del proyecto de la Asamblea a través de la Banca del Ciudadano, y reuniones con hasta delegados gremiales, solo sirvieron para ganar tiempo para presentar una vez más un mamarracho con olor electoral. La Asamblea a través de un vídeo de producción propia, revela hasta qué punto no se hizo nada por descontaminar la zona, y más aún, demuestra que todavía queda mucho por descubrir sobre el desastre ambiental provocado. Nuestra Asamblea no va a dejar de pedir por la descontaminación. La empresa que venga no podrá continuar sus trabajos, hasta que remedien el pasivo ambiental dejado, construyan las obras necesarias para el tratamiento de los efluentes y expliquen al pueblo el por qué se continúa con una historia, que más de una vez, nos demostró en qué va a terminar, un cuento repetido, mientras una dirigencia gremial, política y social, y una justicia tibia, y a veces, demasiado permisiva y pasiva, desarrolla una industria criminal, jugando con la salud de todo un pueblo y su medioambiente, incluyendo el agua, que no sobra en nuestra región. La Asamblea no va a decaer en su lucha, si la historia se repite, no bajará los brazos ni por un momento, para que se cumpla su pedido, de un aire, agua y tierra limpia para nuestro pueblo. Por un Nonogasta y Chilecito, sin contaminación.